03 septiembre 2012

Experimentos caseros VII: Coca-Cola y Mentos

(Vía)
Este es uno de los experimentos favoritos de Paola, así que en su honor, tenía que dedicarle una entrada. ;)

A diferencia de lo que la gente normalmente piensa no se trata de una reacción química entre los componentes del caramelo y del refresco, sino más bien, de un fenómeno físico.

En realidad, un refresco se compone de agua, y de distintos edulcorantes y sustancias que le dan sabor y color, más el dióxido de carbono (gas). Los fabricantes de bebidas carbonatadas envasan el producto a una temperatura baja en una cámara a alta presión: asñi, se consigue disolver este gas en el líquido del refresco. El dióxido de carbono establece un equilibrio químico con el agua de la bebida tal que así:

CO2 + H2O HCO3- + H+
HCO3- + H+ ↔ H2CO3

El dióxido de carbono, en sus diversas formas químicas en equilibrio acuoso, es responsable del sabor y del pH ácido que permite conservar la bebida de la presencia de microorganismos, ya que no son capaces de habitar un medio hostil. A este respecto, cabe señalar que los refrescos tienen un pH de 2,5 (en la escala de 0 a 14). Hay estudios que señalan que la acidez de las bebidas carbonatadas (que además del dióxido de carbono tienen ácido fosfórico) pueden producir daño en el revestimiento interior hasta llegar al estómago, donde incluso podrían competir con el ácido clorhídrico que tenemos allí para digerir los alimentos. Consumir bebidas carbonatadas en exceso está relacionado con problemas de salud como la diabetes o trastornos cardiovasculares. Lo más sano para el cuerpo humano es el agua, y deberíamos tenerlo en cuenta en nuestra dieta, aunque eso no significa que debamos dejar de consumir refrescos.

Al abrir una lata o botella de refresco, vemos las burbujas de dióxido de carbono que van liberando lentamente a la atmósfera. La tensión superficial del líquido retiene parte del gas disuelto, pero todos hemos experimentado que dejando sin tapar la botella, finalmente deja de haber burbujas y se pierde parte del sabor del refresco.

Cuando echamos Mentos sobre la Coca-Cola se rompe la tensión superficial, liberándose bruscamente el gas. En HdC nos explican que esto se debe a varios factores y no solo al Mentos: la forma y tamaño del recipiente de la Coca-Cola, la goma arábiga presente en el refresco y en los caramelos, y la textura de la superficie de lo caramelos.
(Vía)
Finalmente os dejo un par de vídeos (vía HdC) para que disfrutéis:



Referencias



Y como experimento casero VIII, les recomiendo la saponificación (hacer jabón) explicado muy bien por @Quimitube

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